YOG

La carne no es débil, la carne es un buen recurso si sabes sacarle provecho. De la carne vienes y en carne morirás siendo devorado mientras tus ojos, me hablan sobre ti

Anteriormente un clérigo, Yog comenzó a tener visiones sobre la próxima «era del mar profundo» donde los residuos del alma humana caían hasta profundidades inimaginables y se convertían en los componentes centrales del «nuevo mundo». A partir de estas visiones, Yog pudo acceder a una forma condensada y estancada de la Oscuridad más poderosa que la humanidad estándar, a la que llamó «lo Profundo». Pero finalmente desarrolló una tendencia al canibalismo y tomó el hábito de consumir humanos, se formó un culto a su alrededor y Yog terminó devorando, no sólo a personas si no también, corren rumores de que algunos ya olvidados dioses antiguos, cayeron en sus fauces, robando su poder.

Esta deidad es ahora conocida como El devorador de la carne, dios de los caníbales, moradores y conocedores del desierto.

Es representado con sangre en las tablas de piedra antigua, como una máscara creada con distintos retales de cuerpo de otros rostros. Su tercer ojo, se mantiene sobre su frente, creando un triángulo perfecto con los dos restantes; Dicen que con este tercer ojo, tiene la potestad de ver a través de los de sus presas cuando son devoradas y así, quedarse son sus vivencias.

φ Dogma: Sólo deberás de comer carne humana, pues es la única que te dotará de la suficiente satisfacción. Cuando obtengas una presa, lo primero que deberás de comer mientras aún sigue con viva, son sus ojos, pues es la única forma de poder aprender sobre ella y así arrebatarle no solo su sabor, si no su esencia. Si tu presa ha muerto, no deberías de comer sus ojos, pues de hacer eso, podrías acabar loco. La piel es un bien necesario, por lo que antes de comerte a tu presa, deberás despellejar y tratar la piel como si se tratase de la piel de un animal. Nunca se sabe, cuando se necesitará vestir como la presa cazada para comportarte como ella y así obtener cosas.